El sábado 16 de septiembre, en el Santuario Sagrado Corazón de Jesús de la localidad bonaerense de San Justo, Santiago Cieschi, Federico Salse y Facundo de Nicolo, realizaron su profesión perpetua como Salesianos de Don Bosco.

En una celebración presidida por el P. Gabriel Romero, superior de los Salesianos de Argentina Norte (ARN), concelebrada por más de 20 salesianos consagrados; y acompañados por familiares, amigos y jóvenes de los distintos grupos que acompañan, Santi, Fede y Facu le dijeron nuevamente «sí» a Dios para entregar el resto de sus vidas al servicio de los jóvenes, tal como lo hizo Don Bosco.

Durante la celebración se vivió un clima de profunda alegría y gratitud a Dios, que día a día sigue llamando a seguirlo más de cerca en la construcción del Reino.
Antes de finalizar la Eucaristía, los 3 neoprofesos perpetuos dijeron algunas palabras acerca de lo que significó este gran paso. Agradecidos por poder celebrar la vida y la fe a través de personas concretas, y por haber sido acompañados por sus familiares, salesianos y jóvenes a lo largo de todo este tiempo, manifestaron su deseo de ser fieles discípulos del Jesús que se “jugó” radicalmente por los más pobres y los últimos.

Con estas nuevas vocaciones salesianas, Dios manifiesta que «ama y bendice a la Congregación, y la quiere viva para el bien de los jóvenes y de su Iglesia» (const., 22).

Por Emiliano Arruabarrena