Las bandas del Batallón 11 de Córdoba y del Batallón 3 de Congreso (Buenos Aires), dos de las más grandes del Movimiento Exploradoril Salesiano, llevaron adelante un proyecto conjunto que unió música, amistad y espíritu salesiano.

La iniciativa surgió a partir del intercambio en redes entre los coordinadores de ambas bandas, que soñaron con la posibilidad de tocar juntos y compartir su pasión por la música. Ese sueño se hizo realidad en julio, con dos momentos memorables.

Del 10 al 14 de julio, la banda del Batallón 11 viajó a Buenos Aires, donde tuvo lugar el primer concierto. Luego, el 26 de julio, fue la banda del Batallón 3 la que viajó a Córdoba, cerrando la serie de encuentros con un concierto que reunió a más de 350 personas.

Música que educa y transforma

Siguiendo el estilo educativo de Don Bosco, quien siempre valoró el arte y la música como parte fundamental de su propuesta para los jóvenes, las bandas salesianas se consolidan como un espacio privilegiado para su desarrollo integral. 

Son una alternativa educativa y recreativa que permite a cientos de chicos y jóvenes aprovechar su tiempo libre de manera sana, aprendiendo a ejecutar instrumentos de viento y percusión, complementando con formación teórica y con una experiencia de trabajo en equipo. Así, la música se convierte en escuela de disciplina, creatividad, amistad y valores.

Una experiencia más que enriquecedora

Durante la estadía en Buenos Aires, los músicos y familias del Batallón 11 también visitaron la Iglesia Mater Misericordiae, de gran importancia histórica ya que fue la primera casa de los primeros misioneros salesianos que llegaron a nuestro país. Además recorrieron el microcentro porteño y compartieron actividades con el Batallón 3.

Este encuentro de bandas fue una experiencia inolvidable, donde los jóvenes exploradores pudieron aprender, crecer y enriquecerse mutuamente. La música se convirtió en puente para reafirmar el carisma salesiano y fortalecer el espíritu explorador.