¡La luz de Jesús ha brillado con un nuevo resplandor!

Dejemos que su luz inunde todo nuestro ser y toda nuestra vida. Que nada ni nadie nos haga perder la esperanza, tenemos por delante un tiempo nuevo.

La fuerza de la Resurrección nos haga poner de pie, abrir nuestros ojos y nuestras manos a nuestros hermanos.

Salgamos a contagiar la alegría de haberlo encontrado. Él es nuestra Paz.

 

P. Gabriel Romero SDB - Inspector ARN