El Papa Francisco firmó, en el día de la Anunciación de nuestro Señor, la nueva exhortación apostólica «Christus vivit – Cristo vive», fruto del último sínodo sobre Jóvenes, Fe y discernimiento vocacional.
Francisco I visitó el Santuario de Loreto el lunes 25 de marzo, en la fiesta litúrgica de la Anunciación. Este es un «lugar privilegiado para contemplar el misterio de la Encarnación del Hijo de Dios», según las palabras del Pontífice, ya que allí se conservan muros que habrían sido testigos directos del «sí» de la Virgen María, de acuerdo con la tradición popular.
El Papa dirigió palabras a los presentes, entre quienes se encontraban las autoridades locales eclesiásticas y civiles, frailes capuchinos y fieles laicos. Se refirió al Santuario como un «oasis de silencio y piedad» donde la Virgen recibe a enfermos, familias y jóvenes especialmente.
Pero el motivo fundamental de su visita a Loreto es que este lugar fue elegido para la firma de la exhortación apostólica que en español se traduce como «Vive Cristo, esperanza nuestra». Este documento surge de las reflexiones y oraciones en el marco del Sínodo sobre jóvenes, llevado adelante en el mes de octubre de 2018. El Vaticano difundirá el texto de la exhortación el próximo 2 de abril, en memoria de la muerte de San Juan Pablo II.
Las claves de la vocación
En relación al texto bíblico de la Anunciación y a las instancias del Sínodo de los Jóvenes, podemos distinguir tres momentos fundamentales a la hora de hacer cualquier opción vocacional:
1.- Escucha
Fuera del ruido y la agitación, es el oído atento a la voz de Dios. Esta significa un llamado discreto pero fuerte a un camino coherente de fe y vida cristiana.
2.- Discernimiento
Es profundizar en las capacidades y actitudes propias, en colaboración con la iniciativa divina, con sincera humildad y reconocimiento hacia el que hace todas las cosas.
3.- Decisión
Decir que sí, como María, con confianza y convicción, con total disponibilidad a la voluntad de Dios.
Fuente: Vatican News