El Equipo de Acompañamiento Salesiano de Jóvenes sigue soñando alternativas para caminar a la par. Ahora, nuevamente desde la presencialidad.
Para un carisma que tiene como base la presencia, el «estar en medio», ha sido un verdadero desafío continuar la tarea educativa y pastoral desde el aislamiento social. Sin embargo, aún en medio de las dificultades, hubo un grupo de personas que siguió buscando y generando con creatividad, nuevas formas de estar juntos.
Así lo hizo el Equipo Nacional Salesiano de Acompañamiento de Jóvenes, que ya venía trabajando en esta sintonía a través de la formación de educadores y animadores. En el año 2020 impulsó un proyecto junto a docentes de la Universidad Salesiana de Argentina (UNISAL) que consistió en poner teléfonos a disposición, para un espacio de escucha virtual. De ese modo lograron permanecer cerca, aprendiendo que la presencia, no necesariamente, implica presencialidad.
Claro que todo es más lindo cuando podemos caminar abrazados, decirnos una palabra al oído, mirarnos a los ojos sin intermediarios.
Con el objetivo de soñar nuevos reencuentros, este equipo se congregó en Córdoba, en la Casa Inspectorial de Argentina Norte, del 25 al 27 de noviembre. Sus integrantes son Hijas de María Auxiliadora y Salesianos de Don Bosco pertenecientes a cada una de las 5 inspectorías que funcionan en Argentina. Durante la mañana del sábado se sumaron también las personas encargadas de los contenidos de la Escuela de Acompañamiento.
«Reflexionamos todo lo vivido desafiados por la necesidad de acompañar a los jóvenes traspasados por tantas realidades que se evidenciaron en este tiempo», dijo el P. Alejandro Musolino SDB, responsable del proyecto. Además, adelantó lo que se viene: «Después de animar la escucha virtual de jóvenes en pandemia, conferencias virtuales de temáticas relacionadas al acompañamiento, activaremos los encuentros presenciales en el mes de febrero del 20 al 26 de febrero de 2022».
