La promoción del Don Bosco de Paraná organizó la tradicional Semana Salesiana en formato virtual junto a sus educadores .

Desde 2004, en el colegio secundario de Paraná se realiza la tan esperada “semana salesiana”. Este año, a pesar de las limitaciones, no quiso ser diferente. Por eso, un grupo de estudiantes de sexto, acompañados por docentes y preceptores pensaron y planificaron juntos la SEMANA SALESIANA en formato VIRTUAL. La misma se llevó adelante del 23 al 27 de noviembre, a través de plataformas como Meet, Discord e Instagram.

“Desde que empezó este año, la incertidumbre fue protagonista, cada día era un nuevo comienzo, un nuevo misterio por descubrir», dice Abril, estudiante de sexto año. Cuenta que «entre tanto caos, nos vimos a nosotros, terminando sin terminar, poniendo un pie afuera de nuestro segundo hogar». Entonces decidieron dejar una huella antes de irse, «la que nos correspondía, la Semana Salesiana».

 

Se trata de una tradición del colegio, que este año fue reformulada. No faltaron las actividades de preguntas y respuestas, las presentaciones del curso, competencia de tik tok, just dance, y obras artísticas en donde los y las jóvenes expresaron a través de videos, poesías y dibujos mensajes que ayuden a concientizar sobre el cuidado de la casa común.

También hubo “día deportivo”: competencia de flexiones, jugaditas, plancha y salto a la soga; juegos en línea y competencias de talentos. Desde la música, arte y gimnasia los estudiantes compartieron con toda la comunidad educativa sus dones, creatividad e imaginación.

“Comenzó como una idea, al azar, entre tantas, y terminó como un hecho concreto y único. No vamos a decir que no fue complejo intentar crear desde la virtualidad, pero pudimos, y compartimos momentos hermosos en cada una de las actividades llevadas a cabo. La diversidad abunda, por eso los juegos eran muy diferentes también entre sí. Pudimos aprender mucho de ello». 

Abril agrega que «esto solo funciona si ponemos un poco cada uno, todos juntos. Don Bosco, otra vez, nos enseña de amor, nos une y nos permite disfrutar, jugando y aprendiendo, nos da lugar para expresarnos y nos demuestra, que por más de que la distancia sea larga, siempre vamos estar unidos por su mano”.

Sin dudas, todo esto se pudo llevar adelante por la predisposición y responsabilidad de estudiantes y docentes. Una vez más, en estos tiempos, podemos decir que:

¡las redes se volvieron patio y ahí queremos estar!