Acompañar, más aun cuando cueste. El Boletín Cagliero de este mes nos invita a compadecernos y comprometernos.

 

«bienaventurados los que lloran, porque serán consolados»

 

Esta es la bienaventuranza que propone el P. Guillermo Basañes en el Boletín Cagliero 11 del mes de abril. El Consejero General para las Misiones Salesianas invita a permanecer a la par de quienes sufren, recordando que es esta la tarea del misionero salesiano.

 

Además, el documento incluye una breve reflexión en torno al Seminario sobre el Primer Anuncio en Angola, y el testimonio de cercanía del misionero Reto Wanner:

«No bastaba compartir mis conocimientos de ingeniería y mis habilidades profesionales; eso no es suficiente, cada vez es más necesario estar con los jóvenes para acompañarlos.»

 

La invitación a la santidad viene de la mano de la Sierva de Dios Antonieta Böhm, y la oración es «por cuantos promueven integralmente a la persona humana a través de las obras sociales«.